El precandidato de Morena por Apizaco Rafael Álvarez, fue acusado de tráfico de influencias y de haber supuestamente sobornado a empleados de la Procuraduría General de Justicia del Estado, para tramitar varias constancias de antecedentes no penales.
Y es que todo mundo sabe que el empresario Rafael Álvarez, le compró la candidatura a Lorena Cuéllar Cisneros al financiarle parte de su campaña para que sea la próxima gobernadora, claro siempre y cuando gane.
Según algunas personas que tenían horas de estar formadas para obtener sus cartas de no antecedentes penales, de pronto llegó el precandidato de Morena para la alcaldía de Apizaco junto con varias personas y le dieron acceso inmediato para que realizará el trámite correspondiente junto con algunas personas que al parecer forman parte de su planilla para integrar el ayuntamiento rielero.
Por todo lo anterior los quejosos informaron que existen actos de corrupción en la Procuraduría General de Justicia del Estado y pidieron que ojalá y el titular de la PGJE José Antonio Aquiahuatl tome cartas en el asunto para que no permita que se practiquen actos fuera de la ley.
Finalmente se lamentó la actitud de prepotencia que asumió Rafael Álvarez y su comitiva al introducirse a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado para obtener las cartas de no antecedentes penales.