A pesar de sus “arduos esfuerzos” y su “amplia trayectoria” como coordinadora de los diputados de Morena, Marcela González Castillo nuera del ex Gobernador Sánchez Anaya, quedó fuera de la siguiente legislatura.
La reciente determinación del Consejo General del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE), respecto al reparto de plurinominales, excluyó a la “soberbia política” que creyó que, asegurando el primer lugar en la lista de representación proporcional, “nadaría de muertito” para mantenerse tres años más en el cargo.
Entre los de Morena, la noticia se considera parte de la justicia divina, pues González Castillo se jactaba de ser la principal estratega política en Tlaxcala, y hay quienes hasta la escucharon decir que gracias a ella Morena logró los resultados del pasado 2 de junio, cuando en los hechos la verdadera estratega de la justa electoral fue la gobernadora Lorena Cuéllar, quien es la única con derecho en colgarse las medallas del triunfo guinda.
Tan es así que Marcela González nunca creyó que la gobernadora lograría ‘carro completo’, lo que en automático dejaría a Morena sin “pluris” para evitar su sobrerrepresentación.
Ante este revés, el único consuelo de Marcela González es decir que gracia a ella Morena consiguió la hazaña del pasado 02 de junio, afirmación peligrosa porque en su soberbia parece intentar usurpar el lugar que solo le corresponde a su jefa política.
¿Será que este giro inesperado de los acontecimientos lleve González Castillo, a conformarse con solo ser la próxima presidenta del DIF municipal?
