La cena del 31 de diciembre es una de las más importantes del año, y en México, hay una tradición que no puede faltar: las uvas de la suerte. Según la costumbre, al dar la medianoche, se comen 12 uvas, una por cada campanada, y se piden 12 deseos para el año que está por comenzar.
En el mercado Emilio Sánchez Piedras, en la capital tlaxcalteca, se puede encontrar uva fresca y sin semilla, lista para ser disfrutada en la cena de fin de año. El precio por kilo oscila entre los $100 y$ 200 pesos, dependiendo de la calidad y la procedencia de la uva.