Al gobierno de San Francisco Tlacuilohcan y al presidente de comunidad Alberto Sánchez Alcántara: sepan que el día de hoy tuvieron que dormir a un perro que fue brutal y cobardemente atacado aparentemente con un machete. Le rompieron la mandíbula, le mutilaron la lengua y lo dejaron desangrándose a su suerte.
La o las personas responsables de este DELITO no pueden quedar impunes ni andar libres por las calles de nuestra comunidad. ¿Cuántos perros más tienen que matar? ¿Qué va a pasar cuando terminen de matar a los perros? ¿Qué más tiene que pasar para que ustedes, la autoridad responsable se haga cargo?
No es la primera vez que atacan a un perro con un machete. Exigimos justicia y cero impunidad para la o las personas responsables.
A la comunidad: Ayúdenme a compartir, no seamos indiferentes a un ataque de este tipo, está persona puede ser nuestro vecino y no podemos permitir que una persona que ejerce un nivel de violencia tan grave esté en libertad. No tiene que atacar a otro animal indefenso de una manera más violenta para que exijamos justicia.
Somos más los buenos y confío que la autoridad actuará como corresponde.
Mi mamá y yo al ver la publicación de los vecinos pidiendo auxilio acudimos al lugar donde se encontraba, lo llevamos al hospital para ver si se podía operar. La veterinaria nos dijo que tenía un 30% de posibilidades de sobrevivir a la operación y, en caso de sobrevivir, no podría volver a comer y durante la recuperación corría riesgo de no poder cicatrizar de manera adecuada, que se podía infectar gravemente y su calidad de vida no sería digna. Sabiendo esto, tomamos la decisión de que lo durmieran. El perrito ya había perdido mucha sangre y evidentemente estaba sufriendo demasiado. Estuvimos hablándole mucho, abrazándolo y haciéndole saber que su dolor y sufrimiento iba a terminar.
No fue un atropellamiento, no fue un ataque de otro perro, esto no me lo estoy inventando, la veterinaria especialista nos dijo que las heridas de mutilacion no estaban desgarradas, eran cortes limpios hechos con un cuchillo o machete y el perro no presentaba lesiones en otras partes del cuerpo. Fue un ataque premeditado por un humano o varios para someter al perro y mutilarlo sin que pudiera moverse.
Su lamentable muerte no puede quedar así. Por favor, ayúdenme a compartir.” (sic).
