La Secretaría de Salud confirmó este viernes el primer caso de influenza A(H3N2) subclado K en México, identificado por el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER). El paciente recibió tratamiento ambulatorio y actualmente se encuentra recuperado, sin complicaciones.
El Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (SINAVE) informó que mantiene un monitoreo permanente para la detección oportuna de nuevos casos en el país.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, esta variante presenta características clínicas similares a la influenza estacional, por lo que el manejo médico es el mismo y no representa un motivo de alarma para la población. La dependencia recordó que apenas el pasado 11 de diciembre no se había reportado ningún caso confirmado del subclado K en territorio nacional.
El virus de la influenza A(H3N2) circula de manera regular cada temporada; sin embargo, el subclado K, clasificado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), presenta cambios antigénicos que podrían influir en la efectividad de las vacunas. No obstante, datos preliminares de Europa indican que la protección contra hospitalizaciones se mantiene en niveles similares a los de años anteriores.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) señaló que, aunque esta variante ha incrementado su presencia en Europa y en algunos países de Asia, no se han observado cambios significativos en la gravedad clínica. Además, respaldó la información de la OMS sobre la efectividad de la vacuna de esta temporada para prevenir enfermedad grave.
Los síntomas son los habituales de la influenza: tos, dolor de garganta, congestión nasal, dolor de cabeza, dolor muscular, cansancio extremo y, en algunos casos, vómito y diarrea, principalmente en niños. La transmisión ocurre por gotas respiratorias, contacto con superficies contaminadas y en espacios cerrados y concurridos.
Las autoridades sanitarias reiteraron que la vacunación es la principal medida preventiva, especialmente para adultos mayores, personas con enfermedades crónicas, mujeres embarazadas y niños pequeños. También recomendaron medidas como el lavado frecuente de manos, cubrirse al toser o estornudar, uso de cubrebocas en lugares concurridos y permanecer en casa ante síntomas.
Finalmente, la OMS y la OPS exhortaron a los gobiernos a reforzar la vigilancia epidemiológica, garantizar alta cobertura de vacunación y fortalecer la capacidad de los servicios de salud ante una posible mayor actividad del virus.
