Luego de que se originara una controversia por trasladar a una persona aun nosocomio, al tratar de aclarar la situación, delegación de Cruz Roja asegura que su personal estuvo involucrado en el hecho.
Luego de que el pasado lunes generara confusión y controversia el hecho de que una persona que ya carecía de signos vitales fuera trasladada a un hospital en la i capital, a denegación de Cruz Roja trato de aclarar la participación de socorristas de la institución en el hecho, donde el nosocomio se negaría a reconocer que el fallecimiento se registró en sus instalaciones y existe la duda sobre la posible comisión de un delito al trasladar el cadáver sin conocimiento de la autoridad judicial,
Al respecto, el coordinador estatal del área de socorros de la benemérita institución, Gustavo Hernandez Rosendo, solicitó que se aclararan algunas cuestiones inherentes al hecho, donde apunto que los paramédicos no realizaron el traslado del ahora occiso al nosocomio, el cual habría sido llevado por sus familiares, sin embargo, reconoció que en el exterior del centro hospitalario, cuando les solicitaron asistencia para ingresarlo, los socorristas ignoraron el hecho de que se encontraba muerto, y omitieron el protocolo de valoración y regulación ingresándolo al ara de urgencias.
Dijo que al momento del hecho, se encontraban realizado el ingreso de una paciente del sexo femenino al centro hospitalario, cuando personas en un vehículo particular les solicitaron ayuda para ingresar q un hombre que carecía de señas de tener conciencia.
“Después de que ellos estaban en la recepción de la paciente, posteriormente llega un vehículo el cual llevaba a esta persona que ya no contaba con signos, por un paro cardio respiratorio, y los mismos familiares y el personal pide ayuda para subir al paciente a una camilla… pero no lo traslado la ambulancia de Cruz Roja”, aseguró.
“ fue casualidad, por que ellos estaban entregando a otro paciente”, insistió, esto para después reconocer que si bien ellos no trasladaron al sujeto hasta el hospital, no solo realizaron omisiones al protocolo al no valorar al individuo que carecía ya de signos vitales, sino que ademas la situación no fue regulada de acuerdo a los protocolos, manipulando un cadaver sin previo conocimiento de la autoridad judicial,, e incluso propiciando una situación de contagio o riesgo para el personal y ciudadanos en el interior al desconocer las causas del deceso.
Si bien se confirmo que el fallecimiento derivaba de un paro cardio respiratorio, hasta ese momento se ignoraba si la situación se habría originado por contagio de alguna enfermedad o condición media de riesgo para las personas que se encontraban en contacto con los restos, lo que contravendría la premia de preservar la integridad de posibles víctimas de contagio.