En Apizaco, por razones desconocidas tunden “a palos” a sujeto en posible situación de calle.
Un vídeo corto captado por cámaras de seguridad cuya copia fue hecha llegar a nuestra redacción, muestra el violento castigo al que fue sometido un sujeto en posible situación de calle, que con objeto contundente fue maltratado por solitaria persona y abandonado en vía pública; incidente nocturno que fue atendido de manera reactiva por elementos policíales y paramédicos de Apizaco en Tlaxcala, localidad considerada en algún momento por la administración municipal en turno, “el mejor lugar para vivir”.
Información complementaria al archivo de 43 segundos de duración señala, que hace unas noches sobre la Avenida Mariano Matamoros casi esquina con Barberan y Collar de la colonia San Martín de Porres de la comuna rielera -a un costado del deportivo-, aprovechando le escasez de vigilancia el perpetrador vestido con ropa deportiva y armado con lo que parece ser un palo; ataca por la espalda al hombre alto, con barba y cabello crecidos identificado como Daniel -N-, quien sostiene una pequeña ánfora con supuesta bebida alcohólica en una de sus manos.
Hombre que ante la embestida consistente de al menos 27 golpes a la parte alta de su ser (cabeza) trata de cubrirse con una de sus extremidades superiores, para después caer y ante el inesperado embate finalmente perder el conocimiento quedando sobre el piso a merced de su “verdugo”, quien continúa con el castigo al área del rostro principalmente; para luego cobijado por la oscuridad y sin deshacerse del objeto, proceder a retirarse del lugar cubriendo su identidad con la capucha de la sudadera.
Se sabe, el personaje de edad mediana que fue objeto de la agresión directa podría ser quien se destaca por su errante andar por algunas calles de la ‘Ciudad Modelo’, pero más por su actuar inestable y violento en agravio de algunas personas, el que con abundantes manchas de líquido hemático y hasta “irreconocible” fue ubicado aún con signos de vida; desconociéndose si fue trasladado para recibir atención médica o fué abandonado en el sitio de la agresión, debido a su posible grado de intoxicación que no le permitió repeler o responder a la agresión.