El mini funcionario del Centro Regulador de Urgencias Médicas de Tlaxcala (CRUMT), Gustavo Hernández Rosendo, quien es el coordinador de ambulancias de Cruz Roja, públicas y privadas, acostumbra a burlarse de paramédicos voluntarios que a comparación del malo funcionario, trabajan sin cobrar.
El labor altruista por parte de paramédicos voluntarios en el Estado de Tlaxcala, a salvado las vidas de muchos ciudadanos, que aun con muchas carencias, estos hombres y mujeres, pagan con su dinero el combustible y mantenimiento de la ambulancia para atender accidentes que se suscitan en territorio tlaxcalteca.
En muchas ocasiones los paramédicos voluntarios, son los primeros en llegar en algún tipo de accidente y gracias a la prontitud de la atención pre hospitalaria mucha gente vive para contarlo.
Tal fue el caso del lamentable accidenten suscitado el 28 de septiembre del año en curso, sobre la carretera Apizaco-Tlaxco, a la altura del municipio de Tetla de la Solidaridad, en donde la camioneta donde viajaban peregrinos que se dirigían al San Miguel del Milagro, fue chocada por un trailer color azul.
Ante este hecho los primeros paramédicos que llegaron al lugar fueron voluntarios, quienes confirmaron el accidente y empezaron a brindar atención medica a los lesionados.
Derivado a la tardanza del arribo de ambulancias dos lesionados de gravedad fueron trasladados a un nosocomio abordó de una patrulla de la policía municipal de Tetla de la Solidaridad, después de 30 minutos aproximadamente arribaron paramédicos del CRUM, así como una camioneta con la leyenda Centro de mando (CRUMT).
Después de que fueron atendidos los lesionados y en el lugar sólo quedaron las unidades siniestradas, los paramédicos voluntarios, decidieron tomarse una foto a un costado de su ambulancia, en ese momento Gustavo Hernández Rosendo “Blanco 1”, se empezó a burlar de los voluntarios realizando comentarios denigrantes que propician el odio en contra de quienes brindaban auxilio sin ninguna paga.
Trabajadores del CRUMT, informaron a este medio de comunicación que Gustavo Hernandez, suele ser un hombre misógino, soberbio y arrogante, además de que según versiones es un hombre con diversas personalidades pues cuando se encuentra con los jefes muestra una cara diferente.
Ante esta situación en la que fue testigo este medio de comunicación, es necesario solicitar la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Estado (CEDH), además de que dicho sujeto tendría que dar una disculpa pública para limpiar la imagen de la dependencia en la que trabaja.
