El papa León XIV exhortó este domingo a orar para que “todos los niños del mundo puedan vivir en paz”, durante la tradicional bendición de las figuras del Niño Jesús, celebrada tras el rezo del ángelus en la Plaza de San Pedro.
“Queridos jóvenes, delante del pesebre recen a Jesús también por las intenciones del papa. En particular, oremos juntos para que todos los niños del mundo puedan vivir en paz. Les agradezco de corazón”, expresó el pontífice al dirigirse a los fieles desde la ventana del Palacio Apostólico.
La Plaza de San Pedro fue escenario de la tradicional Bendición de los Niños del Belén, una celebración en la que fieles de todas las edades llevan sus figuritas para que el papa las bendiga antes de colocarlas en los pesebres de hogares, escuelas y oratorios.
Durante su intervención, León XIV envió “un saludo especial a los niños y jóvenes de Roma”, quienes sostenían figuras de distintos tamaños, desde las más pequeñas hasta las más grandes.
A lo largo de la mañana, catequistas y animadores recibieron a cientos de niños y jóvenes, quienes participaron en actividades y juegos antes de unirse a la oración del ángelus y recibir la bendición papal.
El pontífice, que participó por primera vez este año en esta celebración, agradeció la iniciativa al Centro de Oratorios Romanos, promotor de esta tradición iniciada en la década de 1980 y que se realiza cada diciembre.
En el marco de las últimas semanas del Jubileo de la Esperanza, el papa concluyó su mensaje deseando a todos los presentes “un buen domingo y una santa y serena Navidad”.
