Este miércoles 24 de junio con limitados filtros sanitarios para los múltiples accesos, la Presidencia Municipal permitió la instalación de los comercios ambulantes del giro de ropa entre otros considerados como no esenciales y que durante 12 semanas el área de Servicios municipales no les permitió laborar, quedando un grupo al margen, ya que no fueron avisados acerca de la reanudación de sus actividades restringidas por la actual fase de contingencia.
Es de resaltar que son más de 600 comerciantes los que integran el padrón del tianguis de los miércoles, y que se encuentran distribuidos por zonas y representados por más de 5 líderes; al parecer algunos de ellos olvidaron convocar a todos sus afiliados, amén de otros más que por apáticos no están debidamente representados, efervescencia que no ha considerado atender en tiempo y forma la Administración a cargo del C. Saulo Pérez cuyo único objetivo tiende a ser la obtención de dividendos derivados de la negligencia, olvido o apatía de los comerciantes con respecto a las normas de comercialización que imponen el uso de cubrebocas, gel y otros; cuya sanción se transforma en ingresos.
Tras 12 largas semanas en el exilio, sin percibir ingresos, los mercaderes debieron enfrentar sus gastos, deudas así como la alimentación de sus respectivas familias, situación que las autoridades municipales soslayaron.
En entrevista con estos famélicos vendedores declaran: “tenemos un presidente –Julio César Hernández Mejía- al que ni por humanidad le interesa la problemática que se padece ante la presente pandemia del Covid- 19, pudimos comprobar estas 12 semanas que el edil de extracción panista es indiferente a las limitaciones a que se sometieron, pues –mientras él cuenta con unos ingresos seguros- los conflictos y la seguridad de los ciudadanos no le interesan”.
