El miedo viaja en combi sobre la vía corta: no existe vigilancia policiaca

Como se diera a conocer hace dos semanas gracias a la cobertura de los medios digitales, cuando pasajeros que viajaban en un autobús de la línea ATAH, fueron víctimas de un atraco a manos de dos masculinos, hechos donde gracias a la oportuna intervención de un ex- miembro de las fuerzas armadas, se logró la detención de un asaltante y la muerte del otro delincuente; resultando gravemente herido el ex oficial.

A últimas fechas las fuerzas de seguridad en una extraña amalgama con miembros de Protección Civil así como personal de Coeprist, se han dado a la tarea de clausurar moteles ubicados sobre la vía corta Chiautempan- Puebla y deteniendo a numerosas féminas que son explotadas por sus proxenetas para ejercer la práctica de sexoservicio, valiéndose para ello, de imponentes operativos que inclusive han incluido la participación de la Guardia Nacional; hechos que por su espectacularidad han bloqueado por horas el tránsito de esta importante vía de comunicación.


Lo que a últimas fechas ha detonado son los asaltos a pasajeros de combis que salen de Chiautempan hacia las poblaciones ubicadas sobre la referida vía corta; denuncian los agraviados que los atracos son perpetrados casi siempre en el tramo que se encuentra después de la vía del ferrocarril, justo antes de Tlaltelulco, lugar donde después de despojar de sus pertenencias a los pasajeros, descienden de la unidad de transporte público para escapar en un vehículo que escolta a la unidad asaltada.

Las autoridades de Secte no han actuado en consecuencia y los temerosos operadores únicamente han optado por preservar la integridad de su vida mediante la precaria seguridad que les brinda la instalación de una burda malla de hierro. Una vez más es doloroso constatar cómo los sectores más desprotegidos de la población que abarca desde madres de familia, obreros y hasta estudiantes son las víctimas potenciales.

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