Encubre y solapa CESESP a funcionario

A petición de Hernández Pulido, policía “brindó la atención” para no detener a conductor de vehículo oficial que en estado inconveniente causó accidente

No obstante que Ángel Ricardo Contreras Santamaría titular de la Dirección del Centro Estatal de Prevención Social (DCEPS), dependiente de la Comisión Ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad Pública del Estado de Tlaxcala (CESESP) que encabeza Maximino Hernández Pulido, asegura el caso del accidente -hace unos meses- en el que se vió involucrado con un vehículo propiedad del Gobierno del Estado que generó daños materiales a dos autos particulares y lesiones a una mujer ha sido atendido personalmente, resuelto y pagado un cheque de la aseguradora para subsanar los daños y los gastos a los afectados; queda la sospecha de un posible tráfico de influencias y hasta solapamiento en su beneficio, por parte de su superior.

Información revela, que la noche del pasado viernes 27 de Enero del año en curso sobre la carretera federal Tlaxcala-Puebla a la altura de una tienda de conveniencia, el automóvil marca Volkswagen tipo Jetta de color blanco con placas de circulación XVA-007-V del Gobierno del Estado adscrito al Centro de Control Comando Comunicaciones y Cómputo (C4) que era conducido en probable estado inconveniente por Contreras Santamaría en su avance a velocidad no moderada en un primer momento chocó al Honda City, color gris y placas particulares XVY terminación B; y que en probable intento de huida colisionó por alcance al Nissan Altima matrícula terminación PJR anteriores del Distrito Federal (DF) accidente que dejó lesiones a “D” -N- de unos 28 años.

Hecho de tránsito que fue reportado al 911 y movilizó de manera reactiva a elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y cuerpos de auxilio, siendo los primeros quienes abanderaron preventivamen el lugar pero en ningún momento aseguraron al conductor del vehículo oficial, quien -según versión de testigos- gracias a un llamada de Maximino Hernández Pulido a los uniformados, brindarían la atención en favor de su subordinado; esto mientras la víctima era trasladada en ambulancia a un nosocomio para recibir atención médica oportuna y personal de grúas con equipo retiraba los vehículos tres involucrados en el fuerte accidente, que por un lapso de tiempo considerable conflictuó la movilidad en la salida a Zacatelco.

Después se judicializó el incidente que por fortuna no dejó víctimas, pero -según versiones de fuentes cercanas al caso- sí enfrentó dificultades en el acceso a la impartición de justicia en favor de la mujer afectada, principalmente por la negativa del todavía funcionario estatal a comparecer, ya que al sentirse protegido por su jefe el titular de la CESESP “quien es gente de confianza de la Gobernadora”, hasta se habría negado a pagar y responder por sus actos, situación que según consulta al avance de las investigaciones, a más de cuatro meses el caso continúa impune y en espera de resolverse; versión que contradice al probable responsable, quien no negó el tráfico de influencias en su beneficio y justificó el accidente fué por una falla mecánica, mismo que al no ser detenido y mucho menos dictaminado, queda duda respecto a su posible intoxicación etílica.

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