Con datos de ahorainformat.com
“Ya siéntese, señora”
En un acto heroico digno de película de Disney con presupuesto del Canal Once, la diputada local Madai Pérez Carrillo anunció que va a solucionar el problema de los perros callejeros… ¡pidiéndoles que manden su INE y su cartilla de vacunación por WhatsApp!
Sí, leyó bien. Si usted es un perro callejero con acceso a un smartphone, datos móviles y documentos en PDF, felicidades: ya puede ser esterilizado por el Gobierno. Eso sí, tiene hasta el 23 de mayo para pre-registrarse. No se pase de lanza con las fechas, perro.
Super Madai y su lucha contra el abandono (sin presupuesto, sin cifras, sin plan, pero con ganas)
La diputada, famosa por llegar al Congreso ocupando un espacio reservado para la comunidad LGBTTTIQ+ que ni representa ni respeta, dio una conferencia de prensa a la que casi no fue nadie (ni los perros), para anunciar la campaña. Cuando le preguntaron cuántos perros hay en la calle, respondió con una técnica avanzada de evasión conocida como “balbuceo con nerviosismo”.
“No tengo la cifra exacta, pero… este… hay un estudio, este… del INEGI… bueno, eso me dijeron”, dijo una de las veterinarias, mientras revisaba su celular como si fuera un oráculo místico.
¿INE, WhatsApp y PDF? ¡Ya ni los humanos pueden!
Según la brillante logística de la diputada, para que un perro callejero sea esterilizado, debe tener un dueño, INE vigente, cartilla de vacunación escaneada y conocimientos básicos en digitalización de documentos. Se rumorea que algunos lomitos ya están buscando cibercafés abiertos para mandar sus papeles antes del 23 de mayo.
Por si fuera poco, si el perro no tiene cartilla, se le expedirá una nueva ese mismo día, como si fuera trámite de licencia de conducir. “Lomito Pérez González, nacido en la banqueta de la 3ra Poniente, vacunado contra el aburrimiento”, dirá su cartilla improvisada.
“Estoy trabajando en eso”, dijo mientras no trabajaba en eso
Cuando se le cuestionó si existe una iniciativa en el Congreso para castigar el abandono animal, la diputada aplicó el clásico: “Ya estamos trabajando en eso”, que en idioma político significa “no tengo nada, pero sonrío para la foto”.
Por ahora, el equipo organizador no sabe cuánto va a costar la campaña, de dónde saldrá el dinero, ni qué día exactamente ocurrirá. Pero lo importante es que ya hay números de WhatsApp, y eso en política es lo que cuenta: hacer como que se hace.
Tlaxcala, el multiverso del absurdo político
Así, mientras miles de perros deambulan por las calles sin que nadie legisle en serio para protegerlos, nuestra honorable diputada prefiere hacer campañas de PowerPoint sin fondo, sin forma y sin respeto por la inteligencia colectiva. Eso sí, dice que está “trabajando”, y en cualquier momento también nos pide RFC y comprobante de domicilio del gato del vecino.