La tarde-noche del jueves la tragedia se hizo presente en una cisterna que fue habilitada como bodega para granos, ubicada en un domicilio particular del municipio de Papalotla en Tlaxcala, a la que ingresaron cuatro hombres y una mujer, quienes en ese pequeño espacio; al estar expuestos de forma directa a un químico perdieron primero el sentido y luego la vida, movilizando de forma inmediata a la policía y cuerpos de emergencias.
Fue poco antes de las 20:00 horas que el llamado al 911, activó un protocolo de emergencia en el domicilio sin número de la calle Iturbide del barrio El Carmen de la comuna ya mencionada, donde al interior del espacio cerrado (de difícil acceso) que está en el piso de un terreno bardado, había sin sentido e inmóviles cuatro hombres y una mujer sobre los bultos que contenían granos de maíz .
Y es que según algunas versiones, Isabel -N- de 71 años y sus dos hijos Margarito -N- y Antonio -N- de 46 y 34 años respectivamente, ‘bajaron’ a la cisterna para disponer del producto del campo para su venta quedando sin sentido en ella; debido a que habrían inhalado los gases generados por un químico (identificado como fósforo de aluminio) que sería utilizado para repeler plagas; entonces al percatarse que algo no estaba bien Brenda -N- y Ricardo -N- de 42 y 18 años se introdujeron con intenciones de ayudar, corriendo por desgracia la misma suerte.
En el lugar, policías municipales al intentar rescatar a la mujer y al joven presentaron sintomatología específica por lo que se optó en esperar el apoyo de las demás corporaciones que acudieron al lugar con equipo autónomo; siendo uno de los efectivos de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC); quien de forma segura descendió y pudo constatar que los miembros de la familia carecían de signos de vida, por lo que se acordonó el lugar donde estaban Cruz Roja y elementos de la Secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC) para solicitar la presencia de la representación social.
Tiempo después, ya con la presencia de Guardia Nacional (GN), dos unidades mortuorias del Servicio Médico Forense (SEMEFO), policías de investigación y una pertinaz lluvia que sirvió de marco a la trágica situación, se inició con la extracción -uno a uno- de los cuerpos de los infortunados; que fueron colocados en las gavetas de las camionetas para su traslado al anfiteatro en la capital, donde fueron sometidos al procedimiento de ley que determine de forma científica y jurídica; las causas reales del deceso múltiple, para el deslinde de responsabilidades.
