Aparecen en las redes sociales mensaje de personal médico pidiendo a la gente se quede en casa, tras el aumento de casos críticos en hospitales el stress crece.
Lo más duro de esta pandemia del SARS-COV 2 en el País empieza a hacer estragos, los enfermos positivos han aumentado a tal grado en esta Fase 3 que personal médico que está atendiendo a los paciente graves de este virus, ya comienza a pedir AUXILIO en las redes sociales pidiéndole a la población quedarse en casa.
Los turnos extendidos y el trabajo arduo de estos profesionales de la salud, los están poniendo sobre la pared en estos momentos, donde al aumento de los casos graves y la falta de personal, los están agotando al limite de usar medios de comunicación sociales como facebook, twitter e instagram para informar de la situación que se vive al interior de las salas hospitalarias donde llegan pacientes Covid.
Les dejaremos un fragmento de una carta publicada en la red social de facebook, donde narran literalmente su situación:
“Quédense en casa, por favor.
Sin pelos en la lengua y con una disculpa anticipada, les puedo decir que esto está de la chingada, se vive mucho estrés aquí en el hospital, hace 3 días un compañero de limpieza e higiene le gritó a su jefa, sin una causa justificable( pero tenía miedo de que lo metieran a urgencias) hace 2 días un médico anestesiólogo me gritó, me tocó estar de monitor en salida donde nos quitamos el equipo de protección personal, mi función era decirles a todos los compañeros que salen den área COVID, como quitarse el equipo de protección personal, gritando detrás de una puerta de cristal entreabierta, paso a paso, lamentablemente el Doctor se vistió mal desde que entró y a la hora de quitarse el equipo quedó desprotegido, vi su miedo, su frustración, su estrés, y me dijo una sarta de groserías, a pesar de eso seguí guiándolo hasta que salió, he estado adentro y afuera y esta muy cabrón, me gusta mi trabajo, me gusta ser enfermero pero me falta mucha experiencia, realmente impone tener pacientes de 30, 35, 40, 45 años (jóvenes) postrados en una cama, dependiendo de un ventilador mecánico, a parámetros máximos, con sonda de alimentación, sonda vesiculares para orinar, catéter central, bombas de infusión, con saturación de oxígeno que jamás imagine podría ver en un paciente…”
Son las palabras de un enfermero que expresa como el stress y el cansancio está afectando ya al personal de un hospital COVID ante el aumento de pacientes es estado crítico, y sin duda se puede sentir todo ese sufrir dentro del nosocomio.
La carta continua diciendo lo siguiente. “Estamos aprendiendo mucho pero por rebosamiento, a prisas, a la mala, y eso genera estrés, 7, 8 horas con un equipo de protección personal asfixiante, encerrados, un ambiente lúgubre, todas las salas llenas de pacientes con los mismos síntomas ( y te cae el “20”, este virus existe y está haciendo mucho daño), la tos armoniza el ambiente como una sinfónica constantemente, canalizar con guantes, con los lentes empañados, aguantando las ganas de orinar, sintiendo el sudor y la humedad , cuando crees tener todo bajo control, llega la comitiva de anestesióloga a la sala de tu compañero porque va a intubar otro paciente, que probablemente no vaya a mejorar, y tratas de apurarte para ayudarle porque igual que todos tienen muchas más cosas que hacer, (he visto mucha solidaridad) también la alegría de ver pacientes que se van de alta a su casa a seguir su tratamiento, emociones fluctuantes, “código blanco activado” suena desde el conmutador para que nadie salga, nadie use escaleras o elevadores porque trasladarán pacientes de urgencias a piso, o muertos “código alfa activado” y sabemos que vienen un paciente en ambulancia que pasará directo a urgencias por que viene muy mal, también del conmutador suena una voz con palabras de aliento, ayer una oración de súplica a Dios, estaba en la sala poniendo un medicamento, al terminar la oración 3 pacientes dijeron amén. Se hace un nudo en la garganta, ayer una paciente se orinó en la cama antes de irme y le cambie la ropa de cama, me dio una palmada en la mano y me dijo ¡gracias, has sido un Ángel!, eso reconforta, después el punto crítico, desvestirse con el miedo de no llevar nada a casa, porque me espera mi hija, mi esposa, mi hogar… a la salida, muestras de cariño, hay gente externa que nos trae agua, comida, postres, con mensajes de aliento, y de agradecimiento, cuídense mucho, cuiden a los suyos porque no me gustaría verlos aquí.”
Sin duda un mensaje bastante fuerte de lo que están pasado todo el personal de salud. No sabemos si esta redacción es de México o de algún otro país, lo que si sabemos, que es por lo que están pasando ahora, esta epidemia va dejar más stress pos traumático, que cuando ocurre un temblor de gran magnitud; en el terremoto podemos apreciar los daños y entender la magnitud de daño, en un hospital solo nos imaginamos y nos relajamos los de afuera, mientras que los de adentro mueren poco a poco, y aun así siguen luchando, por salvarse y salvar vidas.
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