
No estoy desarraigado; ¡sé lo que está pasando en Tlaxcala porque soy tlaxcalteca!
Es difícil escribir lejos de mi estado natal, donde nací y crecí. Recordar las calles de mi Apizaco y mi Atexcatzingo me llenan de nostalgia, pero esta oportunidad de vida temporal me ha colmado de paz y me ha llevado a encontrarme conmigo mismo. Salir de Tlaxcala no fue fácil. Dejar a mis seres queridos…