En el día eran policías y en la noche robaron y asesinaron a un hombre que su único delito fue estar en el momento menos indicado
Eran las dos de la mañana del sábado seis de enero del año en curso, cuando Fernando N., de 45 años de edad circulaba abordo de su vehículo tipo Jetta clásico, marca Volkswagen, color blanco, con dirección al municipio de Totolac, Tlaxcala.
Fue cuando Geovanni N., y Juan Carlos N., director y comandante de Seguridad Pública y Vialidad del municipio de Nopalucan, abordó de una camioneta marca Ford, tipo F150, balizada de patrulla, marcaron el alto a la unidad que conducía Fernando N.
En ese momento le disparan en la cabeza, para después llevar el cuerpo a la altura del libramiento Chiautempan-Tlaxcala, a la altura de la Trinidad de Tepehitec, lugar donde fue abandonado tratando de engañar a tratar de hacer creer que se trató de un atropellamiento.
Los homicidas policías, se llevaron el vehículo del occiso y se dirigieron hacia el municipio de Santa Ana Nopalucan, lugar donde las cámaras de C5, perdieron el rastro de la unidad, los uniformaron actuaron como si nada hubiera pasado.
Todo el mal actuar de estos malandrines fueron grabados por cámaras de videovigilancia del nuevo C5i, medio de prueba que ayudo al Ministerio Público a integrar la carpeta de investigación y así solicitar la orden de aprehensión en contra de estos sujetos.
La audiencia inicial se llevó acabo la tarde de este martes 22 de enero del año en curso, en dicha audiencia se formuló imputación y el juez dictó como medida cautelar la prision en contra de estos delincuentes quienes con asesoría de sus abogados solicitaron la duplicidad de término para que el juez resolviera si los vincula o no a proceso.
Ahora en Tlaxcala, los ciudadanos se deben cuidar de los policias quienes son los que deberían de cuidarnos y prevenir algún hecho delictivo, pero ahora son ellos quienes roban y asesinan.